¡CORAZONES PARA SAN VALENTÍN!

Me encantan las «festividades» de todo tipo, creo que ya lo he mencionado antes. Sobre todo porque me permiten crear e inventar cosas que normalmente no hago a lo largo del año. Halloween y Navidad son mis favoritas, pero Pascuas y sobre todo San Valentín, me divierten mucho. ¡Sin duda soy una romántica empedernida!
¿Les cuento algo? ¡mi marido es toooooooooodo lo contrario a mi! Ni romántico, ni meloso, ni «empalagoso» así que en cada San Valentín lo torturo con lo que para el son «cursilerías». ¿Postres de chocolate con forma de corazón? ya lo hice ¿y con corazones de chocolate por encima? también… ¿corazones de azúcar? si, eso también… ¿y cajas de corazón con golosinas de corazón adentro? si… jaja todo lo que se les ocurra, lo hice (digamos que van varios años de tortura).
Obvio que lo hago para molestarlo pero siempre termina siendo divertido.
Este año preparé estos bocaditos tan fáciles que cualquiera los puede hacer, en serio, y además ¡seguro enternecen hasta al más indiferente!
 
Ingredientes:
1 bolsa de galletitas Oreo Minis (las venden en cualquier supermercado pero en caso de no encontrar pueden usar las de tamaño normal)
150 grs de chocolate de taza semi amargo (o pueden usar con leche o blanco si prefieren, pero tengan en cuenta que con el blanco se va a transparentar un poco la galletita que es muy oscura).
Grajeas de corazón (las encuentran en todos los supermercados o en tiendas de decoración de tortas. Si no encuentran, puede ser azúcar rosa o roja)
1 cucharadita de aceite de coco, si tienen, o el más neutro que tengan (es para que el chocolate quede más líquido y sea más fácil cubrir las galletitas)
 
 


 
Preparar una tabla o placa y forrar con film o papel manteca para que no se peguen.
Cortar el chocolate en trocitos y llevar al microondas de a 15 segundos, revolviendo cada vez, hasta que esté completamente derretido (también lo pueden hacer a baño María).
Una vez derretido, agregar el aceite de coco (u otro) y mezclar bien.
Lo ideal es que el chocolate esté en un bowl chico y profundo, así es más fácil sumergir la galletita.
Introducir la galletita dentro de el chocolate hasta que quede toda cubierta y con un tenedor retirar y dar golpecitos suaves para sacar el excedente de chocolate.

 

 
Antes de sacarla, raspar la base de la galletita contra el borde del bowl para que al apoyar sobre una superficie, no quede excedente que se sobresalga para los costados.
En este momento agregar con mucho cuidado el corazoncito de azúcar (o el azúcar de colores) en el centro.
Este trabajo es muy fácil pero requiere de movimientos delicados.

 
¡Listo! lleven a la heladera hasta el momento de comer ¡no van a poder parar!
 

 
Sabían que…
Con la misma técnica que cubrieron las galletitas ¡pueden hacer unas riquísimas frutillas cubiertas con chocolate!
Yo usé palitos de chupetín para darles un toque más original, pero pueden hacerlas sin palito y las sumergen en el chocolate, sosteniéndolas del cabito.