¡¡Miren este plato de sopa y díganme que no les tienta!!
Llegar a casa, con frío, cansados y terminar el día comiendo algo tan rico, calentito, reconfortante y con ese gusto a «casero» ¡para mi no tiene comparación!
Esta sopa es súper sabrosa, cremosa, algo dulce por el choclo y con el crocante y salado perfecto de la panceta. Requiere de algunos pasos a seguir ya que tiene varios elementos y texturas, pero requiere poco esfuerzo, les prometo.
Los vegetarianos pueden omitir la panceta y seguro que les va a encantar.
No necesitan nada más, bueno, capaz un buen vino y un capítulo de su serie favorita, y listo, la cena perfecta!
Ingredientes (para 4 porciones):
2 cucharadas de aceite de oliva (o el que prefieran)
400 grs choclo congelado (se puede en lata, pero no es tan tierno), descongelado
2 cucharadas de maicena (almidón de maíz) o harina
1 1/2 litro de agua hirviendo
1 cubito tipo Knorr del sabor que quieran (o pueden usar sólo sal si prefieren)
2 choclos frescos (yo los partì en 4 trozos)
100 grs panceta en rebanadas finas
1 cebolla chica o media cebolla grande, picada
Unas ramitas de hierbas frescas
Sal y pimienta a gusto
Lo primero que hacemos es precalentar el horno a 160-170°C.
Forrar una asadera con papel de aluminio y colocar encima las fetas de panceta (con el papel evitamos que se pegue la panceta y se ensucie la asadera).
Hornear unos 15 minutos o hasta que esté dorada y crocante.
Retirar del horno, dejar enfriar unos minutos y cortar chiquita con cuchillo.
Reservar.
(¡No tiren el papel de aluminio que usaron que lo vamos a volver a usar!)
Ahora vamos a la sopa:
Cortar la cebolla.
Calentar el aceite en una olla y saltear la cebolla hasta que esté transparente.
Agregar el choclo descongelado y cocinar unos minutos.
Agregar la maicena o harina y revolver bien para que no queden grumos.
Agregar el cubito o sal.
Agregar el agua hirviendo y las ramitas de hierbas frescas y hervir por aproximadamente 30 minutos.
Mientras hierve la sopa, poner los choclos enteros sobre la misma asadera y papel de aluminio donde cocinaron la panceta, les agregan sal y pimienta y llevan al horno fuerte hasta que se asen y queden bien doraditos.
Apenas puedan tomarlos con la mano, desgranar con un cuchillo. Reservar.
Una vez pasados los 30 minutos de hervor de la sopa, retirar del fuego (quitar las ramitas de hierbas) y colocar dentro del bowl de la licuadora (no laven la olla que usaron que la van a volver a usar!).
Licuar hasta que esté toda la mezcla bien deshecha y homogénea.
Y ahora viene la parte que pueden omitir, pero para mi es fundamental para que la sopa quede suave y cremosa: colarla.
Verter la sopa licuada, a través de un colador, dentro de la misma olla que usaron antes para hervir.

Calentar nuevamente hasta que hierva, corregir sal y pimienta.
Servir en bowls hondos, colocar el choclo asado en la superficie usando una cuchara y luego agregar la panceta. Si quieren pueden agregarle más hierbas frescas deshojadas.