Desde que tengo memoria, siempre me gustó «Halloween»…
En el colegio donde yo asistía se festejaba siempre, no como ahora con tantas golosinas y con las salidas a la calle a pedir caramelos, sino con desfiles de disfraces.
Planeábamos durante semanas qué disfraz íbamos a usar y el día esperado se hacía un desfile de cada clase, cada uno con su disfraz y entregaban premios a los mejores.
También recuerdo, tan chiquita yo, que siempre cocinaba alguna cosa relacionada a Halloween y se repartía ese día a la hora del recreo. ¡Qué recuerdos! y que chiquita era… ya cocinando para compartir jaja ¡¡Si supiera en ese entonces lo que me deparaba el futuro!!
Ahora que me dedico a la cocina como profesión, Halloween sigue siendo mi festividad favorita, no por lo que significa ni por ninguna creencia, sino por cómo me divierto cocinando y decorando cosas «terroríficas» como «dedos de bruja» de galletita, esqueletos de azúcar o chocolate o esta torta con gusanos saliendo de la tierra.
Todos los años decoramos mi casa, tallamos calabazas y les colocamos velas adentro y las ponemos en diferentes lugares de la casa; colgamos «telas de araña» y esqueletos por todos lados. La verdad es que somos casi los únicos del barrio jaja pero no nos importa nada y a mis hijas les divierte aunque no tengan idea qué está pasando con su casa.
Lo que se me ocurrió acá es enseñarles algo que puedan hacer fácilmente para sus chicos en ese día o para cualquier tarde de té. Es una torta húmeda sin harina así todos pueden disfrutarla, con dulce de leche, galletitas molidas de chocolate y gusanitos de gelatina.
¡Espero les guste, les divierta y puedan hacer algo lindo con sus hijos/sobrinos/nietos o con quien más quieran!
Receta (Rinde 14-16 porciones):
1/2 taza de manteca
120 grs de chocolate en barra semi amargo (yo tenía «pastillas» de chocolate)
3/4 taza azúcar
3 huevos grandes
1 cucharadita de vainilla
1/2 taza cacao en polvo amargo, cernido
1 cucharadita de polvo de hornear
3/4 a 1 taza de dulce de leche (o Nutella o «buttercream» de chocolate)
2 paquetes de galletitas de chocolate tipo Oreo (o pueden ser galletitas de chocolate sin TACC para dietas libres de gluten)
1 bolsa de gusanitos de gelatina (o lo que encuentren de golosinas que puedan estar «bajo tierra»)
Molde descartable o asadera de aprox 30 x 20cm (yo usé asadera descartable de aluminio, que la compran en cualquier super y es ideal para llevar a donde sea sin preocuparse porque se rompa al desmoldar, qué fuente usar ¿me la devolverán? jeje)
Precalentar horno a 160°C – 170°C (¡bajo!).
Enmantecar un molde descartable o enmantecar y espolvorear con cacao si es asadera o fuente no descartable (o dejar el «trabajo sucio» para otros integrantes de la casa dispuestos a hacerlo).
En un bowl apto para microondas colocar la manteca y el chocolate en barra (o pastillas) partido en trocitos.
Calentar en intervalos de 20 segundos y revolver cada vez hasta que se haya derretido toda la manteca y el chocolate. Dejar aparte.
Colocar los huevos y la vainilla en el bowl de una batidora. Batir hasta que estén espumosos.
Agregar de a poco el azúcar en forma de lluvia. Batir hasta que la mezcla esté bien blanca y espumosa (se llama a «punto letra»).
Agregar la mezcla de chocolate con manteca y batir unos segundos más hasta que esté todo bien incorporado.
Colocar un colador sobre el bowl con el cacao en polvo y el polvo de hornear y cernir (no dejen de hacer esto ya que sino les va a quedar una mezcla grumosa y poco agradable cuando la coman).
Mezclar con una espátula suavemente, en movimientos envolventes (¡no queremos sacar el aire de los huevos que acabamos de batir!) hasta que esté todo bien incorporado.
Dejar que sus hijos metan los dedos y prueben varias veces.
Colocar en la asadera descartable (o no descartable) y esparcir bien.
Hornear por 30 minutos a horno bajo.
Retirar del horno y dejar enfriar (si pueden intenten que no se les queme un poco como a mi… hmnffffff)
Colocar una capa de dulce de leche (o Nutella o buttercream) y esparcir bien.
Moler galletitas de chocolate en una procesadora hasta que estén como polvo o sino las colocan dentro de una bolsa ziplock y le pegan con un palote de amasar o botella o algo duro hasta que estén hechas polvo. Colocar estas galletitas molidas por encima del dulce de leche.
(parece que seguimos con el control de calidad)
Colocar gusanitos, esqueletos o lo que más quieran y les divierta por encima. Yo tenía un molde para hacer esqueletos de chocolate y usé eso, y además hice una galletita de «lapida» (hoy en día en el mercado pueden encontrar muchísimas decoraciones de este tipo).
Es un proyecto ideal para hacer con chicos ¡les aseguro que se divierten como locos!
